YO SOY EL LIBRO...
Yo soy el libro que
no dice nada;
yo soy tinta y papel y nada más;
no llevaré a tu mente fatigada
ningún nuevo motivo de pensar.
¿Academias?
¿Gramática? ¿Sintaxis?
Son gendarmes de trafico, lector.
Yo soy como automóvil
que pasa por las calles
a gran velocidad
sonando el claxon y aplastando gente
y sin otra mayor finalidad.
Yo soy turiferario
en los altares
de la Santísima Trivialidad.
EU SOU O LIVRO...
Eu sou o livro que não
diz nada;
eu sou tinta e papel e nada mais;
não levarei a tua mente fatigada
nenhum novo motivo para pensar.
Academias? Gramática?
Sintaxe?
São guardas de trânsito, leitor.
Eu sou como automóvel
que passa pelas ruas
a grande velocidade
soando o clácson e esmagando gente
e sem outra maior finalidade.
Eu sou turibulário
nos altares
da Santíssima Trivialidade.
EL MAR
A
Julio Rojas
Inmensidad azul.
Inmensidad
patria del tiburón y el calamar;
por el temblor rumbero de tus ondas
vienes a ser el precursor del jazz...
Síntesis colosal
de mariscos, espumas and steamers.
Profundo aquel filósofo que dijo:
"Cuánta
agua tiene el mar..."
¿Fue Vasconcelos?
¿Fue Bergson?
¿Fue Kant?
O MAR
A
Julio Rojas
Imensidão azul.
Imensidão
pátria do tubarão e da lula;
pelo tremor de rumba de tuas ondas
vens a ser o precursor do jazz...
Síntese colossal
de mariscos, espumas and steamers.
Profundo aquele filósofo que disse:
"Quanta água
tem o mar..."
Foi Vasconcelos?
Foi Bergson?
Foi Kant?
ÉGLOGA IV
Para
Octavio N. Bustamante
Muchacha: Ya sonó
el despertador.
Parece
que amanece.
Tu marido no tardará en llegar
y si me encuentra...
Ya - terrones de
azúcar - las estrellas
disuélvense en la leche matinal;
ya renace la vida pueblerina;
ya los gallos comienzan a cantar...
Oigo mugir un buey
en la barranca.
Muchacha, tu marido
no tardará en llegar...
ÉCLOGA IV
Para
Octavio N. Bustamante
Moça: Já
tocou o despertador.
Parece
que amanhece.
Teu marido logo vai chegar
e se me encontra...
Já - torrões
de açúcar - as estrelas
dissolvem-se no leite matinal;
já renasce a vida interiorana;
já os galos começam a cantar...
Ouço mugir um
boi no barranco.
Moça, teu marido
logo vai chegar...
CÍVICA
A
David Noble
Caterva gobiernista,
que sigue paso a paso,
el cadáver de un heróe que va para el panteón.
Una muchacha tiende rotundo y blanco blazo,
señalando en las nubes el vuelo de un avión...
Vapor caliginoso
levanta de la tierra.
La comitiva marcha, rezumando sudor.
Y un perrito bull-terrier encima de una perra,
afánase y jadea... para mirar mejor.
CÍVICA
A
David Noble
Caterva governista,
que segue passo a passo
o cadáver de um herói que vai para o panteão.
Uma moça estende rotundo e branco braço,
indicando nas nuvens o vôo de um avião...
Vapor caliginoso levanta
da terra.
A comitiva marcha, ressumando suor.
E um cãozinho bull-terrier em cima de uma cadela,
afaina-se e arqueja... para mirar melhor.
RUIDOS
Para
Ignacio Domínguez
En mi cuarto hay
ruidos de diversas clases:
Ruidos sistemáticos y ruidos ambiguos;
ruidos transcendentes, ruidos comme il faut;
ruidos de colores, y ruidos que son
simplemente ruidos...
Palpitar cardiaco
del reloj que suena
en las horas negras de paciente espera:
si perdí en el juego, si gané en amor;
si por la mañana llamará a mi puerta
una mano blanca, o algún acreedor.
(La luz de la luna
penetra en el cuarto
con deslizamientos de gatito manso.)
En qué idioma
dice su palabra el viento?
Es lástima grande que no haya una estepa
en todo el contorno,
así, llamaría corcel vagabundo, etcétera,
etcétera,
a este pobre viento que llora a mi puerta...
Ruidos de la calle.
Tiemblan los cristales,
cristalinamente, como es natural.
Yo, como poeta, me pregunto
"al punto",
¿pasaría la muerte? o quizá el amor...
Pero los cristales,
al temblar, decían
la verdad terrible:
Señor,
fue un camión...
Soy un formidable
teórico del ruido.
Casi soy un genio, un genio auditivo...
RUÍDOS
Para
Ignacio Domínguez
Em meu quarto há
ruídos de diversos tipos:
Ruídos sistemáticos e ruídos ambíguos;
ruídos transcendentes, ruídos comme il faut;
ruídos coloridos, e ruídos que são
simplesmente ruídos...
Palpitar cardíaco
do relógio que soa
nas horas negras de paciente espera:
se perdi no jogo, se ganhei no amor;
se de manhã baterá na minha porta
uma mão branca, ou algum credor.
(O luar penetra no quarto
com escorregadelas de gatinho manso.)
Em que idioma diz sua
palavra o vento?
É uma grande lástima que não haja uma
estepe
en todo o entorno,
assim, chamaria corcel vagabundo, et cetera, et cetera,
a este pobre vento que chora em minha porta...
Ruídos da rua.
Tremem os cristais,
cristalinamente. como é natural.
Eu, como poeta, me pergunto
"de pronto",
passaria a morte? ou talvez o amor...
Mas os cristais, ao
tremer, diziam
a verdade terrível:
Senhor,
foi um caminhão...
Sou um formidável
teórico do ruído.
Quase sou um gênio, um gênio auditivo...